Reinventarse y… ¡vivir!

Voy a lanzarme a la piscina y a contaros alguna cosa sobre mí, sobre cómo he llegado hasta aquí y el por qué de Crea Comunica

Hace poco más de tres años, mi primer hijo me otorgó el título de madre. ¡De MADRE! Cuando ví el positivo en el test de embarazo, me vine abajo. Siempre había deseado ser mamá, pero… ¿qué iba a pasar conmigo? ¿Con la persona que era? ¿Con mi trabajo? ¿Con todas mis pasiones?

Le daba vueltas a todo y me entraba un pánico terrible. De hecho, entonces, aún embarazada, veía larguísimo el permiso de maternidad y pensaba que no estaría las 16 semanas sin volver al trabajo. El periodismo era y es mi pasión y era incapaz de visualizar una vida sin trabajar de lo mío, aunque solo fueran unos meses.

Pero cuando nació mi primer hijo -ahora tengo dos-, todo cambió. Entonces, me sentía incapaz de separarme de él, no concebía mi vida sin pasar un solo segundo separada de mi bebé y, tras seis meses de desconexión de mi vida laboral, decidí coger una excedencia de dos meses. El momento de volver al trabajo fue duro y entré en una depresión bastante bestia, que fue de la mano de episodios de ansiedad también muy fuertes. Me vi forzada a coger la primera baja de mi vida y aquí todo cambió.

La presión que recibía de mi trabajo -incluso aún estando en excedencia sin cobrar ni un duro- me hizo mella y cada vez iba a peor. Y, de repente, ¡pam! Volvía a estar embarazada. Cuando lo supieron mis superiores, empezó un nuevo episodio de mi vida todavía más negro. La ansiedad me acompañaba a cada momento y la presión de mis jefes porque dejara el trabajo hasta que todo estuviera «a lugar» fue terrible. Hasta que, al final, se hizo efectivo mi despido siete días antes de que naciera mi segundo bebé.

Un cambio radical

Yo era una persona que amaba mi trabajo, que lo daba todo por él. He regalado cientos de horas a las empresas por las que he pasado bajo el argumento de que «ésto es vocacional» y debes darlo todo. Y ya me gustaba. Pero ésto no casaba con la maternidad.

Así que nada. Despedida y con dos bebés en mi vida, todo cambió de forma radical. Me salieron muchas ofertas de trabajo en esos meses, que tuve que rechazar porque justo empezaba mi camino por la maternidad. Y pensé… Marta, ¿de verdad quieres sacrificar tu vida entera por tu trabajo? Aunque me apasione, aunque lo adore y lo disfrute, pero, ¿en serio estás dispuesta a renunciar a pasar tiempo con tus hijos? No.

La respuesta tardó en llegar, pero llegó. En todo este tiempo, he hecho varias cosas para reconectarme con mi esencia, pero nada me llenaba y nada me proporcionaba ingresos. Y ahora, ahora que por fin tengo al mayor en la escuela y al pequeño en la guardería, he decidido dar el paso. Reinventarse y vivir.

Creer para crear

Hacía tiempo que le daba vueltas y, en el proceso, me han salido distintas oportunidades laborales que he tenido que rechazar por no poder conciliar, por no tener los recursos suficientes para tener a los dos peques en la guardería, por no tener prácticamente ayuda y, sobretodo, porque me veía incapaz de pasarme 12 horas fuera de casa sin tener opción de estar disponible para ellos.

Manos a la obra y, entre siesta y siesta de mis hijos, las ideas empezaron a fluir. Me he pasado gran parte de mi vida laboral trabajando para medios de comunicación, pero también había llevado la comunicación para alguna empresa. Así que… ¿por qué no lanzarse a la piscina y crear mi propia agencia ofreciendo todo lo que sé hacer?

Y como mi pasión es escribir, pero también crear, diseñar, escuchar y entender, decidí abrir esta página web. ¿Qué puedo perder?, pensé. Como mucho el dinero que he invertido en crear el dominio y en alojarlo en un sitio que me permita diseñarlo.

Y aquí estoy. Dispuesta a darlo todo, entusiasmada por mi nuevo proyecto e ilusionada porque creo que tengo mucho que ofrecer. A lo largo de mi vida, me he formado en muchísimas cosas. A parte de la carrera de periodismo, de mi especialización en periodismo político, empresarial e instiucional, de mi máster en desarrollo personal y liderazgo, y de muchas otras cosas, he estado siempre aprendiendo.

Sobre SEO -posicionamiento web y optimización para buscadores-, sobre diseños varios, edición de fotos y vídeos, redes sociales, copywriting, y un sinfín de cursos relacionados con lo mío -y no tan mío-, que creo, sé, que puedo ofrecer un trabajo integral para hacer que vuestros negocios crezcan conmigo y, por supuesto, con vosotros.

Ésta es mi historia. Muy resumida y con muchísimas cosas que me dejo por el camino, pero, al fin y al cabo, es la historia de la vida que he vivido durante estos últimos años.

Y aquí estoy, abriéndome a todos y todas vosotros y dispuesta a darlo todo por aquellos que decidáis confiar en mí y probar. A ver qué pasa. ¿Os sumáis a mi nuevo reto?